Estamos siguiendo de cerca la situación en evolución en el Líbano, donde el conflicto en curso entre Hezbolá e Israel está teniendo un impacto devastador en la población y en las instituciones educativas.
Durante la última semana, los intensos enfrentamientos han provocado la destrucción de edificios e infraestructuras, afectando especialmente la parte sur del Líbano y la capital, Beirut. Miles de edificios han sido destruidos, con cientos de víctimas mortales y miles de heridos.
Nuestras escuelas lasalianas, el Collège Notre-Dame y el Collège du Sacré-Cœur en Beirut, tuvieron que cerrar sus puertas el lunes debido a su proximidad a las áreas afectadas. Ayer, el Ministerio de Educación del Líbano ordenó el cierre de todas las escuelas y universidades hasta nuevo aviso por razones de seguridad. Hasta ahora, las instituciones La Salle, aunque afectadas por los cierres, no han sufrido daños directos, pero trágicamente, un estudiante y su familia, así como un padre de familia, están entre las víctimas.

Nuestra iniciativa socioeducativa, el Proyecto Fratelli, también ha suspendido sus actividades. Sin embargo, los Hermanos han decidido quedarse en el lugar. La comunidad, compuesta por Hermanos Maristas y Lasalianos, ha estado trabajando en conjunto desde 2016 para apoyar a las poblaciones vulnerables y refugiadas en el Líbano. El Proyecto Fratelli, realizado juntos con la Fondazione Marista per la Solidarietà Internazionale, es el programa más cercano a la zona de conflicto y ya cuenta con un plan de evacuación detallado en caso de que los Hermanos necesiten retirarse por su seguridad.
Los bombardeos continúan a diario y las carreteras están congestionadas, ya que muchas personas huyen de la violencia. Algunas buscan refugio en escuelas, mientras que otras han migrado a Siria.
La situación sigue siendo volátil y es difícil predecir cómo evolucionará. Seguimos comprometidos a apoyar a nuestras escuelas, estudiantes y personal en estos tiempos inciertos. Nuestros pensamientos y oraciones están con todos los afectados por la violencia, y esperamos un pronto retorno a la paz.